4 sept 2015

Se me borra la memoria

En blanco. Cuando intento mirar atrás me quedo en blanco, al menos cuando se trata de aquello que quiero recordar con un gran sentir. 

Se me acaban los recuerdos y no es mucho lo que he vivido ¿o sí? Son 26 años de vida, de momentos recolectados ¿a dónde se van? 

La memoria me recuerda que avanzo, que crezco, que envejezco y se queda lo que vale más, lo que necesitaré mañana.

Pero ¿y si quiero alguna (memoria) que no necesito, que solo me da ganas de recordar? ¿Qué pasa con esa memoria? Creces ¿y? 

Qué hay de las sensaciones ¿las puedes revivir? Y si sientes algo que sentiste ayer, se me ocurre: al beber algo, al respirar, al saborear, al tocar o al verlo ¿eso es malo? 

Qué haces con ese accidente entre sentimientos del ayer y del hoy. 

Hace falta una cernidera que recicle el ayer ¿Y el hoy? Qué hay de él. 

¿Es preciso no mirar atrás? Y qué tal si la vida solo te pone pruebas. Qué tal si las rindes. La calificación será un recuerdo más, una lección más. Y la vida, la vida es eso... Un camino por recorrer, un sendero... Y en el trayecto pones el alma,  la alimentas y creas el "yo". 

Luego miras atrás ¿y qué ves? El mismo "yo" sin algunas herramientas, sin alguna compañía, con palabras limitadas... Y el hoy se alimentó de ese ayer, continuamente así será. 

Mi memoria es blanca. Hoy la alimento y aunque el ayer sostenga esa limpia hoja lo que escriba en ella se habrá convertido  en la renovación del ayer. 

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